Hoy en día los blogs no tienen mucha gracia. Las redes sociales se encargaron de rematarlos. Es más fácil crearse un simpatiquísimo perfil en Feisbuk (La abuela soreta, por ejemplo) y comentar gansadas que a todo el mundo le gusta. La cultura del blog quedo de lado, o al menos eso creo. También está Tumblr, pero eso está lleno de hipsters y feminazis, así que no cuenta. Entonces, ¿por qué apuesto por Blogger en lugar de crear a La abuela merquera? Porque sé que con suerte juntaré un par de lectores, compartiré algún que otro comentario y listo. Ese, para ser completamente honesto, es todo el éxito que pretendo.
Hace varios años atrás, entre amigos pretendíamos crear un blog de la concha de la lora que todo el mundo lea. No lo logramos porque era una mierda y encima nosotros muy pretenciosos. Nunca más se me ocurrió crear un proyecto en grande y los años que pasaron los dediqué a la masturbación, videojuegos, falopa y más formas de perder el tiempo. Justo hoy, cuando fumaba un pucho en el patio, pensé en hacer cosas nuevas y entre ellas surgió éste blog. ¿Cómo mierda lo voy a llevar? No lo sé. ¿De qué poronga se va a tratar? Y de lo que venga. Me chupa un huevo todo, si no hablo de películas hablaré de mi vecina, o sino hago otra biografía de los Kirchner. Nah, tan pobre tipo no soy.
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